"Estoy en el departamento de un amigo que queda en el Barrio Chino
(de Nueva York). Y no quiero gritar mucho acá, ya sabes, es su casa.
Espera, voy a salir mejor". Da un par de pasos, se escucha un choque
con algo y Casablanca empieza a refunfuñar discretamente, en voz
baja: "¡Auch! ¡Dios! ¡Ufff!"
—¿Qué pasó?
"Es que por tratar de salir me quedé con las cortinas del ventanal de
la casa de mi amigo en la mano... Pero bueno. No importa.
¿En qué estábamos?"